Hecho a mano en madera maciza, este juego invita a descubrir la relación entre causa y efecto. Los niños golpean, encajan y desarrollan coordinación y motricidad fina. Inspirado en metodologías como Montessori, favorece la concentración y la paciencia.
Un juego activo que ayuda a descargar energía, aprender causa–efecto y disfrutar de cada pequeño logro. Al mismo tiempo se integra con la decoración del hogar. Una pieza pensada para muchos momentos de descubrimiento, risas y recuerdos.
👉 Recomendación: usar siempre bajo la supervisión de un adulto.
